Trato de hacer memoria cuál fue el primer hecho de inseguridad que cubrí. Voy casi 20 años para atrás pero no recuerdo el primero. No lo recuerdo por que fueron muchos pero muchos. Cientos.
Vi familias destruidas balbuceando ante la cámara pidiendo justicia. Vi tantísimas marchas. Muertes y más muertes. Los delincuentes robaban y mataban. Siempre caían los indefensos…
Mi humilde estadística armada solo con la cobertura periodística me dice que la inseguridad fue creciendo mientras nos decían que era una sensación. Cada vez más AFANOS. Más violentos. Más sangrientos. Y hasta ahora nada ni nadie cambió el panorama para mejor.
Lo que estoy .viendo es una reacción de la sociedad preocupante y peligrosa: La justicia por mano propia.
No estoy loco. Y tampoco estoy a favor de los delincuentes pero esa senda, si seguimos en ella nos lleva derechito al lejano oeste ; algunos partidos por su desprotección se le parecen…
Pueden putearme tranquilos pero salir con un revolver en la cintura y apuntarle al pecho a uno que nos parece sospechoso, NO es el camino.
Necesitamos que el estado haga su trabajo, es decir “que sea la Policía la que impida delitos o atrape a los ladrones o asesinos”.
Cómo eso no pasa, la gente se defiende. Los casos de justicia por mano propia ya forman parte de la cotidiana. Son cada vez más habituales.
El Doctor mató a tiros en la puerta de su casa. El carnicero aplastó con su auto al chorro que murió. El playero de la estación de servicio baño en nafta al ladrón en bici que disparó varias veces pero las balas no salieron…
¿Siempre pienso qué haría yo frente a un delincuente? No se tirar. No tengo armas, pero con bronca y rabia encima, ciego, no estoy seguro de lo que haría… ¿quién puede quedarse como una momia mientras te afanan y te pegan?
Sin embargo se que NO es el la forma para que construyamos una sociedad mejor. Saliendo a matar podemos terminar en una guerra civil.
Y aunque suene a lugar común, es el estado quien debe darnos seguridad en lugar de salir a cazar nosotros ladrones y asesinos.
Solo debemos EXIGIRLO. Y si no hay respuestas, tenemos el voto para castigar.
Yo no quiero vivir entre Rambos que salen a matar delincuentes .
Piénsenlo