Faltaban minutos para las 21 hs. cuando alguien gritó en la redacción «entraron al canal»Para los que no saben y nunca fueron a TN, la redacción está en el sexto piso, bastante lejos de la entrada.
No entendí lo que pasaba. ¿Quiénes entraron? ¿Por qué? ¿Para qué? Pero la cara de la Productora que hizo el anuncio mostraba preocupación, miedo.
Del sexto al segundo piso, donde está la entrada al edificio, tardamos nada. El impacto fue fuerte, había pasado por ahí unos 15 minutos antes de que se desatara la violencia. El hall de recepción había sido atacado, los monitores destruidos, las puertas de vidrio ya no existían, en la pared habían pintado un mensaje: Manieto mafioso
Fue lo primero que vi. Había más… en el playón de estacionamiento los violentos habían dejado más marcas en los autos con los que se fueron encontrando. No importaba de quién era, estaba claro que buscaban hacer daño. Un auto tenía un adoquín enorme sobre el capot y el parabrisas. 6 o 7 vehículos estaban seriamente afectados.
Mientras recorría la destrucción me preguntaba cómo entraron. El edificio tiene 3 entradas, de las cuales se usan 2 y donde hay seguridad privada y está la Policía. La que da a la calle Lima está cerrada desde hace más de 1 año. Forzaron ese portón cortaron cadenas y candado.
El edificio tiene cámaras por todos lados, con lo cual a los 10 minutos del ataque vimos todo, unas 70 personas y las banderas que llevaban decían La Cámpora.
Por esos días de junio hubo otro episodio violento. La bosta de caballo en la puerta de la casa del Diputado Espert.
La prisión efectiva de Cristina en su casa explica estos casos y las pintadas por todos lados «no se metan con Cristina»
El kirchnerismo sangra por la herida de tener presa a su máxima expresión. La primera reacción fue nefasta, de los tiempos oscuros de la Argentina
La violencia política ya sumergió al país en muertes inútiles que no solucionaron nada de nada.
Sin temor a equivocarme digo que la gran mayoría de esta Argentina quiere otra cosa.
Sigamos por esa senda de paz.
